En los últimos años, las potabilizadoras se han convertido en una pieza esencial en la mayoría de embarcaciones. El acceso al agua potable es imprescindible si vas a embarcarte en una travesía de mínimo 15 días o en una regata en toda regla, como la Vendée Globe. Para ello lo más cómodo, y menos pesado y voluminoso, es contar con un buen sistema de desalinización del agua. ¿Acaso habías pensado en dar la vuelta al mundo con 25 garrafas de agua a bordo?
Las potabilizadoras marítimas de Eco-Sistems son la opción más sencilla, rápida y de dimensiones más reducidas para potabilizar agua salada. Compactas y enérgicamente eficientes, las potabilizadoras de Eco-Sistems son fáciles de instalar y mantener. Además, al estar fabricadas con materiales resistentes el desgaste será menor y, por lo tanto, el impacto medioambiental será más bajo.
Tras instalar la potabilizadora en la embarcación el siguiente paso será pensar qué requiere tener a bordo un sistema de estas características. Toda potabilizadora necesita de un mantenimiento básico, debido al contacto con diferentes bacterias y otros organismos, por la alta corrosión del agua de mar, el desgaste propio de los componentes, etc. Como cualquier equipamiento, para evitar futuras averías o problemas, es importante conocer cuál es la prevención a seguir, ya que muchos de los problemas que surgen con este tipo de sistemas provienen de un mal mantenimiento. Éste puede implicar el remplazo de alguna pieza, la limpieza en profundidad de alguna zona o la comprobación de que todo funciona correctamente. Sin embargo no será una ardua tarea ni nos llevará mucho tiempo si se respetan los tiempos de mantenimiento marcados desde la marca.
Para una potabilizadora marítima hay una serie de sencillas medidas a seguir. Siguiendo estos 6 consejos podrás preocuparte únicamente de navegar:
Es una operación sencilla, que no tiene por qué tomarte mucho tiempo y que es importante para detectar cualquier problema antes de que sea demasiado tarde. ¿En qué debes fijarte? Cuando revises un filtro debes tener en cuenta básicamente su aspecto exterior. Un filtro sucio causa unas pérdidas de carga cada vez mayores, llegando provocar que las bombas no tengas fuerza suficiente para hacer pasar toda el agua necesaria a través del filtro.
No cualquier filtro vale cuando está en juego el funcionamiento de nuestra potabilizadora. La mala calidad de un filtro puede pagarse muy cara, incluso obligándote a tener que hacer una parada inesperada en el puerto más próximo. Los filtros son los elementos responsables de proteger las bombas y membranas frente a sólidos que pueden estropear a ambos elementos de manera irreversible. Se consideran elementos de sacrificio; no se suelen limpiar debido a su bajo coste, sino que directamente se reponen. Un consejo: descarta totalmente filtros que no sean especiales para potabilizadoras, como los de piscinas o spas.
Estar atento a este tema puede evitar un problema mayor en altar. Por ello es importante que durante la producción de agua vigiles que esta no se escape por donde no debería.
Toda potabilizadora contiene un medidor de salinidad que indica si el grado de salinidad del agua es el adecuado y que, por lo tanto, solo el agua filtrada limpia va a parar al tanque de agua dulce. ¿Cómo ser mira? En los modelos más avanzados de Eco-Sistems (gama Efficient) se encuentra instalada una célula de conductividad que controla en todo momento la salinidad del agua producida.
Siempre que hagas un mantenimiento a fondo acuérdate de ponerla en marcha de nuevo y probar que todo el sistema funciona sin problemas. Lo mejor siempre es hacerlo en el mar, para asegurarte que funciona en su “hábitat natural”.
Para conservar de manera adecuada las membranas, y asegurar una vida útil de varios años, es necesario sacar del sistema el agua salada después de cada funcionamiento de la potabilizadora. Los modelos manuales de Eco-Sistems llevan incorporada una válvula mediante la cual es posible realizar la renovación del agua de mar por agua dulce con un simple accionamiento. En el caso de los modelos automáticos, llevan incorporada la limpieza automática de las membranas mediante electroválvulas automatizadas. Además, siempre que se vaya a tener parada la potabilizadora durante un cierto tiempo se recomienda el uso de algún producto conservante, que impedirá el crecimiento biológico dentro de las membranas.
Si aun siguiendo estos consejos tienes algún problema con tu potabilizadora será mejor que cuentes con el respaldo de una empresa fiable, reconocida en el sector, que pueda ofrecerte la tranquilidad de saber que tras ella hay personal calificado para resolver cualquier incidente o avería que tengas con tu potabilizadora.