Cuando se planifican las vacaciones uno de los temas más importantes es definir dónde se viajará y qué medio de transporte se utilizará. Hay quien se desplazará en coche, en avión o en tren. Otros, unos pocos afortunados, lo harán en barco, y no en uno cualquiera, sino en el suyo propio.
Navegar en barco como patrón y con tu propia tripulación, o incluso hacerlo en un barco ajeno sumándote a otra tripulación, es una de las aventuras más fascinantes y una de las maneras más bellas de conocer un territorio. Si escoges lanzarte al mar en la época más fría del año, cuando las temperaturas rozan valores negativos, debes tener en cuenta algunos aspectos:
Elige la ropa adecuada
En invierno, al viento y a la lluvia se le suma el frío. Por ello es importante saber qué ponerte para mantenerte seco, caliente y cómodo. En viajes o regatas de largo recorrido utiliza siempre varias capas y lleva ropa de recambio; las camisetas térmicas, las chaquetas de agua y los paravientos son tres imprescindibles para conseguir aislarte del frío. Además, para estar en cubierta es importante llevar un traje de agua, un forro polar y botas de agua. Es importante abrigarse siempre la cabeza y las extremidades, detectar dónde tienes más frío (como pies y manos) y procurar tener esas partes siempre abrigadas y secas.
Aliméntate bien
Ingerir líquidos calientes, como tés o infusiones, y comidas consistentes (carbohidratos) es una de las mejores maneras de combatir la humedad en un barco, que es incluso peor que el frío. En casos como este, donde la ingesta de líquidos es fundamental, una de las mejores opciones es contar con una potabilizadora para barcos.
Reduce la humedad del interior del barco
Para mantener el barco con una buena temperatura, caliente y sin humedad, es importante contar con un calentador eléctrico y una buena instalación eléctrica que resista el consumo de estos aparatos. Las estufas de propano, alcohol o keroseno acaban contribuyendo a generar más humedad y además pueden ser peligrosas.
Una vez resueltos los principales temas logísticos, y ya listos para afrontar una navegación en pleno invierno, toca escoger destino. De entre todas las posibilidades hay 5 lugares que cualquier patrón recomendaría. ¿Cuáles te faltan por visitar?
1. Ibiza (España)
Aunque es uno de los destinos más clásicos sigue siendo uno de los más visitados, sobre todo en verano. Este paraíso del Mediterráneo ofrece diversas rutas de navegación entre la isla y Formentera, con fondeo en las mejores calas.
2. Cerdeña (Italia)
El norte de Cerdeña es uno de los grandes destinos para navegar. Aunque existen diversas rutas en esta zona, una de las más recomendables es la que, saliendo del Puerto de l’Alghero, se dirige a Cabo Caccia y Stinto. En el Cabo Caccia es de obligada visita fondear cerca de las cuevas y acercarse hasta la curiosa Illa Foradada.
3. Split (Croacia)
Ubicada a 380km de Zagreb, capital de Croacia, y frente a las costas italianas, Split cuenta con una ubicación estratégica. El centro neurálgico de la costa dálmata, en la región de Dalmacia, ofrece grandes posibilidades si se visita a bordo de un velero.
4. Isla de Kos (Grecia)
Esta isla griega del archipiélago del Dodecaneso es conocida por sus paradisíacas playas. Es fácil rodearla navegando, ya que tan solo mide 40km por 8km. Si la visita se os hace corta, Grecia cuenta con muchas otras islas, cada una con un encanto especial.
5. Bay of Islands (Nueva Zelanda)
Nuestra última recomendación ya es un viaje de palabras mayores, al alcance de los patrones más expertos. Situada al norte de Nueva Zelanda, esta región está considerada uno de los parques marítimos más populares del país. Cuenta con hasta 144 islas independientes en las cuales se practican infinidad de actividades acuáticas. Para viajes de larga durada, donde el acceso al agua potable es complicado, la mejor opción es la instalación de una potabilizadora, como la Splash-25 que el patrón Dídac Costa lleva a bordo del One Planet One Ocean mientras participa en la Vendée Globe. Casualmente, Dídac, que tras salir con 4 días de retraso ya se encuentra en la decimoquinta posición, está ahora cruzando la zona marítima más cercana al sur de Nueva Zelanda.
Si ya te has decidido, abrígate y ¡buen viento y buena mar!